Home Banking
Banca Electrónica 3.0
El ahorro es el primer gasto

El ahorro es el primer gasto

Por supuesto que sabemos que no es un gasto. Pero podríamos pensarlo así, ¿no les parece?
Les explicamos por qué: ¿Qué pasaría si pensamos que el ahorro es un gasto fijo, que tenemos que hacer sí o sí? Porque, en definitiva, el ahorro es antes que nada un hábito, entonces si apenas recibimos nuestros ingresos, separamos una parte, listo, primer objetivo cumplido. Aunque sea una parte mínima la que separe. Será un primer paso para comenzar a ahorrar.

Ahora sí. Vamos a una definición convencional:
Ahorro es la diferencia que hay entre ingresos y gastos, es decir la porción de ingresos que me sobra después de haber realizado todos los gastos.

AHORRO = INGRESOS – GASTOS

¡Y ahí está la principal causa de porque la gente no ahorra! No ahorra porque…¡No le sobra! Siempre vamos a tener algo más en qué gastar. Entonces, si esperamos a termine el mes para ver cuánto nos sobró y… difícilmente nos sobre algo.

Es verdad que hoy por hoy, los ingresos que tenemos no alcanzan y que el costo de vida es cada vez más alto. Esto hace que “llegar a fin de mes” sea todo un desafío para la mayoría de las personas, y el ahorro se convierta casi en una utopía, un sueño irrealizable. Pero tomar la decisión de ahorrar no puede depender de solamente si nos sobra dinero. Es una decisión que debemos tomar, independientemente de cuales sean nuestros ingresos.

¿Por qué ahorrar?

Podríamos mencionar muchos motivos, pero principalmente los vamos a dividir en cuatro. En todas estas situaciones, si las asumimos con ahorros, nos van a ayudar a tener mayor previsibilidad y tranquilidad en nuestra vida.

  1. Eventos futuros esperados
    1. Casamiento
    2. Cumpleaños de 15
    3. Nacimientos
  1. Eventos futuros inesperados
    1. Enfermedades
    2. Pérdida de empleo
  1. Gastos opcionales
    1. Vacaciones
  1. Adquisición de bienes
    1. Comprar un vehículo
    2. Comprar un terreno/casa

Recomendación Finanzas Compartidas: lo importante es tomar la decisión de dejar de destinar una parte de tus ingresos a gastos inmediatos y destinarlos a ahorros.